Este monasterio, en el que actualmente viven monjas de clausura dedicadas a la oración y a las manualidades, fue creado en 1845 por Cédula Real de Felipe IV.
Durante todo el año, pero principalmente en el mes de julio, cuando se realizan las fiestas de la Virgen del Carmen, las hermanas venden artículos religiosos que ayudan al sostenimiento de la comunidad.